martes, 17 de mayo de 2011

Ruta de los Castillos en la provincia de Segovia

Como se echa de menos, que entre los dedos no quede tinta mientras escribimos, y que desde la pluma al bic sus puntas dejen de ser testigos de nuestros pasos. No obstante, no sé qué hago, que mientras escribo, siempre termino ensuciando mis manos. Quizás, ya estaban sucias antes de escribir, y lo que termino, es ensuciando el teclado, y es que está claro que tengo tantas ganas de estar aquí, que ni siquiera tras volver de ver el Castillo de Coca he tenido tiempo para acicalarme un poco.

Anoche mientras llegaba el sueño en uno de esos hoteles en los que no quieres quedar dormido, pensé seriamente en dedicar mi próximo post (vamos este) a las Anjanas, Xianas y Lamias.
Creo que no es nuevo para cualquiera que haya leído algo de lo que ya he escrito, que me gusta la mitología, y en especial la ibérica, vamos la nuestra. Además considero que es una gran desconocida, y sólo algunos estudiosos como Luis de Hoyos continuado por su hija Nieves, o José Manuel Gómez, sin olvidar a Constantino Cabal, y sé que olvidó algún otro con su España Mágica, han permitido que muchos de los seres y de las leyendas que la conforman aquella, continúen en el subconsciente colectivo de nuestra generación.

No obstante hoy, no me veo con fuerzas de abordar dicho tema, sobre todo cuando la monumentalidad sigue como cuño intacto todavía golpeando mi cabeza, y alojada en ella, sólo me recuerda la belleza de los castillos de las tierras Castellano-Leonesas.

Me encuentro situado ahora mismo en la provincia de Segovia, hice noche en Segovia ciudad, y me permití el lujo tras volver a visitar una ciudad que me trae tantos recuerdos de mi infancia, recorrer los castillos que se encuentran en el resto de la provincia.

Evidentemente un recorrido por los castillos de la provincia de Segovia no puede tener otro punto de inicio que no fuera el Alcázar.
Para mí, y repito para mí, uno de los más bellos y singulares, de nuestro país. Su arquitectura, sobre todo por el remate de sus torres, salvo una, almenada, nos recuerda a los castillos de arquitectura francesa y concretamente a los del valle del Loira.
Las ciudades que debemos seguir y por tanto seguí para esta ruta de castillos por la provincia de Segovia, me llevó a Turégano y posteriormente a Pedraza de la Sierra. En esta última villa, recuperamos la arquitectura de los castillos del este  y sureste de España. Es fácil diferenciar una estructura de la otra, por la tosquedad de labranza de los sillares y de la construcción en sí. Donde la composición básica de los castillos entre sus espacios, es sin duda, la nuestra.

Desde Pedraza hacia el castillo de Castilnovo, de aquí a Sepulvera y sin duda parada obligatoria, será el castillo de Cuellar. Finalmente entre los ríos Eresma y Voltoya, está él y sólo él. Es su imagen la que no me deja dormir y sobre todo la que cambio el rumbo de este artículo. Considerado como el ejemplo más destacado de la arquitectura militar mudéjar, de fábrica totalmente de ladrillo y rodeado de un ancho y profundo foso que le otorga mayor monumentalidad, se encuentra el Castillo de Coca.

Y es que el recorrido en sí, no es baladí, iniciamos el camino como un Alex que nos perturba por su propia ultraviolencia en la obra de Anthony Burgess, transitamos por el descanso que ofrece el Korova Milkbar, acompañados por la música de Funeral of Queen Mary de Henry Purcell, para terminar en el punto más álgido de nuestra visita y puesta en escena. Eso es lo que transmite dicho itinerario,  que como cualquier acto de comunicación debe en un principio captar la atención, mantenerla y de nuevo elevarla para que la imagen de un Castillo como el de Coca, no nos deje dormir.

lunes, 9 de mayo de 2011

Burgos: Un lugar donde vale la pena perderse.

En ocasiones escucho muchos compañeros que no saben porque existen ciertas ciudades con un encanto especial, cuyo nombre el público general no suele tener en mente cada vez que planea abordar un viaje. Supongo que en ocasiones nos perdemos con la mirada de los demás y dejamos de utilizar la nuestra. Por otra parte es bastante lógico, es mucho más cómodo.

A todo el mundo se le viene a la mente, la anécdota de mirar hacia un lugar, normalmente hacia el cielo, como si avistásemos algo, y como la gente movida por nuestro interés, va parando hasta generarse un grupo importante de personas que no saben que miran. A lo que el primero, podría responder que no miran nada. Evidentemente es un caso extremo, en el turismo gracias a dios, siempre hay algo que mirar. Y de hecho lo último que pretendo es ofender, sin embargo mucha gente sigue moviéndose siempre por los lugares que otros marcaron sin percatarse, que el destino es algo que debemos decidir nosotros, nadie más.
Cuando se piensa en turismo de playa en la costa valenciana, siempre se escucha Benidorm o Gandia. No dejan de ser buenos sitios donde ir, pero, por qué no mirar un poco más allá, quizás encontremos lugares de ensueño, y se me pasa por la mente más de uno.

Lo mismo me pasa cuando pienso en lugares como Burgos, tanto ciudad como provincia. Burgos te permite la posibilidad de descubrir un enorme patrimonio gótico, renacentista, barroco, esencialmente con su Colegiata de San Pedro en Lerma, o los retablos de Felipe de Vigarny o Diego de Siloe, no sólo en la Catedral de Burgos sino también vistosos como el de Santa Clara de Briviescas. Provincia llena de castillos y sepulcros Reales, donde además de los artistas mencionados también deja obras de gran talla Berruguete.
Todo esto aderezado con la contemporaneidad de su Centro de Arte Contemporaneo, o espacios como El Cultural Cordón y Círculo Central que no hacen más que enriquecer la oferta cultural.

Pero, por si esto no fuera poco, sumamos gastronomía, fiestas y unos parajes naturales realmente sorprendentes como los Montes Obarenes, el Salto del Nervión, las Lagunas de Neila, Hoces del Ebro y Rudrón o los Sabinares del Arlanza, repletos todos ellos de una fauna variada y singular que contribuyen a hacer de la provincia un lugar único, con cientos de rincones donde perderse y disfrutar.

Sin duda, provincia como ciudad presentan un elevado interés tanto para el turismo cultural de ciudad como el turismo cultural rural.

Fiestas más representativas de la ciudad de Burgos:

  • San Lesmes: Se celebra el domingo mas proximo al 30 de Enero. Tiene gran importancia la gastronomia local.
  • El Obispillo: Se celebra cada 28 de Diciembre.
  • San Pedro y San Pablo: Sin duda, son la mayor expresión festiva de Burgos. Se celebran a finales de Junio.